¿Querés conocerla más? En la descripción que sigue sabrás cómo se lleva con su círculo, su forma de manejar el bolsillo, su carácter, profesión, amores y más secretos, para que la conquistes.
De lo más ameno de conocer del zodiaco. Una mujer con rasgos centrados que no pierde dulzura y distinción. Prudente e idealista. Siempre será alguien que siga lo que piense y trate de aportar su grano de arena unido al amor. Desprende buena vibra. Muy bella desde lo físico y mental. Planes que se unan a sitios agradables y culturales de interés la pueden. No son tan buenas decidiendo y huyen de la soledad.
Ciertamente, andar con una mujer Libra es célebre. Irás de su mano a la diversión segura, lo nuevo y la experiencia constante. Amiguera, de conocer a muchos, aunque no le interesen tanto en lo profundo. En la pareja, te hará parte y buscará que te sientas pleno, pero también lo necesitará ella, a pesar de que es muy segura de sí. Es que la hembra libriana analiza mucho y eso incluye saber si es querida. Irradia luz.
Aire y fuego le son pares ideales. ¿Te encontrás allí? Entonces ganala siendo un compañero transparente y llevando buena apariencia. Adora ser escuchada, aun así, no seas intenso, deja de interesarse. Tené claro que prefieren? Amor antes que relaciones, al menos hasta que se emparejan.
Diferentes, pero se complementan. Ella estará encantada del ímpetu de su hombre Aries, aunque al principio puede no verlo muy varonil, y le dará esa calidez que a veces le falta. Si no sofoca, la relación puede avanzar al éxito.
Los une Venus, y eso es palabras mayores: la compatibilidad amorosa es elevada. Aman, buscan equilibrio y lo creativo los puede. Forman grandes equipos y tiene buena química en la intimidad. La practicidad de él la dotará de ese empuje que a veces le falta a ella.
Fluyen con el aire de su elemento. Es decir, se entienden como pocos signos. El lado travieso de él se une a la dulzura y sociabilidad de nuestra libriana. Disfrutan la compañía y en los planes se enriquecen. Cuidado con engaños.
Para este dúo el afecto lo es casi todo en la vida, por eso, funcionan. Adoran la familia y la armonía, aunque pueden no ponerse muy de acuerdo en las formas. Ella es más sociable que el hogareño cangrejo, y eso provoca desencuentros.
Alta compatibilidad para esta pareja. Gustos similares, comparten emociones y vida con el entorno. Se muestran, aman la estética y son equitativos con casi todo. Pueden pecar de celosos. Futuro cierto.
Si se encuentran en la vida, será como amigos y no mucho más. No comparten muchas cosas, aunque si aprecian la benevolencia uno del otro. Él será más de acción, mientras ella imaginará a lo grande.
Muy compenetrados. Para los astros son equilibrio y estabilidad plena. Se dan espacio, son cariñosos y adoran compartir vida social juntos. Atentos, detallistas y frescos. Duran mucho. Ojo a los celos, porque aún sin querer, seducen.
La sensualidad está a la vista en este par que atrae naturalmente. Por eso, si o si se atraerán par una aventura formidable, pero no mucho más. Los planteos, posesividad y falta de confianza los perjudican. Cuidado con volverse una relación tóxica.
Se comprenden, ayudan y conversan. Esta dama y este caballero alcanzan una asociación ideal y soñada. Se potencian en proyectos, profesiones y les encanta sociabilizar. Duran para toda la vida. Cuidado con celarse demás.
Tienen poco y nada que ver. Sus diferencias son tan notorias en caracteres que quizás ni siquiera quieran tratarse mucho. La libriana lo notará un hombre bastante distante a su calidez, mientras este la creerá fantasiosa y muy habladora.
La palabra y lucidez mental los acerca. Es posible que sean enormes amigos y hasta alcancen un nido de cariño pleno. Aun así, el acuariano precisa independencia y ella es mucho más romántica. Él no podrá seguirla en su manera de ser en pareja y ella desencantarse.
Están hechos uno para el otro. Los planetas se alinean con este dúo amoroso. Ella ama su lado poeta y él su calidez pura y armoniosa en todo sentido. Sensuales, soñadores. Algunos desencuentros por cambios de humor. Romance de cuento.
Si la libriana está permanente en busca del equilibrio innato, no es raro que encuentre su centro ideal estando casada. Sí, se sentirá llena. Esto hace que sea plena para la convivencia. En la rutina será alegre, fiel y cariñosa con su par, y querrá que este lo note.
De todos modos, su humor algo especial la lleva alguna que otra vez a precisar que, como pasaba en el noviazgo, le recuerden lo importante que es y le den tranquilidad. Si no encuentra esa balanza natural, tiende a ser difícil de seguir hasta que logre lo que sea que desee.
Como mamá, es muy auténtica. Se lleva genial con sus pequeños, pero no malcría. Ella quiere libertad, pero también obligaciones. Serán grandes seres a su lado. Aprenderán lo mejor de la vida, lo justo, y se criarán excelente.
No se puede tener una amistad más divertida y espontánea que con la mujer Libra. Tendrá la oreja, la casa o la llave del auto listos para llegar a los dos minutos. Apoya en todas, es leal y comprometida con su círculo, como pocas.
Como negativo, no es alguien que haga de los planes caseros su gran interés. Por eso, no será ideal para sillón y familia. Más bien pretende lo nuevo y la aventura con su grupo de pertenencia. Esto puede crear rispideces porque algunos pueden pensar que siempre hay que complacerla. Al contrario, ella solo quiere frescura.
Puede parecer que el equilibrio está en cada aspecto vital para la libriana, pero no. Cuando se trata de manejar el bolsillo suele perder parte de su mesura y gastarlo bastante rápido. No quiere decir que lo que gana lo gasta si o sí, pero si derrocha cuando quiere llevar lo que es tendencia o cenar en el mejor lugar. En algunas puede variar.
En lo profesional, no será alguien que dé a la primera con lo que quiere, pero al encontrarlo escala sin detenerse. Su temple la ayuda mucho. Escucha, conversa y hace.
La libriana es ideal para carreras como juez, abogada y ventas, entre otros, porque les apasiona ser justas con las partes. Lidera con gracia y astucia. Cortés.